Preguntas para antes de pedir un aumento de salario

Pedir un aumento salarial no es sencillo, pero tampoco recomendamos lanzarse a la calle con pancartas para lograrlo. Lo ideal sería nunca tener que pedirlo, pues los aumentos deberían llegar antes de que usted se sienta insatisfecha con el que tiene.

También hay que entender que los aumentos salariales no deben ocurrir porque aumentó el costo de la vida, porque ya no le alcanza para vivir o porque hace mucho no le aumentan. Ninguna de estas son razones válidas y es que las causas de un incremento deben estar vinculadas a su desempeño dentro de la empresa

A continuación se presentan nueve preguntas que son necesarias formularse antes de solicitar un incremento salarial.

Preguntas y respuesta

¿Es preferible pedirlo individualmente o en grupo? Siempre es mejor de forma individual, pues el resultado final será mucho más efectivo.

¿A quién se pide? Al jefe directo. Los aumentos tienen que ver con el grado de responsabilidad y el logro de metas y objetivos, pues en función de eso el empleado agrega valor a la empresa y entonces es justo que reciba más. El jefe directo es el único que puede decir esto.

¿Se debe pedir más para conseguir el salario deseado? Muy pocas veces la persona, al pedir un aumento salarial, especifíca la cantidad. El jefe puede preguntar y el empleado dice cuánto está esperando y debe justificarlo basado en el mercado o si la empresa está en una industria que tiene mucho crecimiento.

La cantidad que mencione no debe ser ni la mínima ni la máxima, debe ser la justa. Siempre tiene que haber una justificación numérica, no sentimental, del aumento salarial. Entonces si es numérica no debe ser muy difícil negociar la cantidad.

¿Qué se considera un buen aumento? Los aumentos generales (es decir, que se aplican a todo el mundo), son entre 5% a 6% del salario, un máximo de 10%, que es mucho. Cuando son aumentos especiales, se dan de acuerdo con el mercado (cuánto se gana en esa posición e<fl otras empresas). También dependerá de si la posición es clave y si desempeña una labor excelente.

¿Se debe decir que se han recibido otras propuestas de empleo? Sí, pero les puede caer mal, sobre todo porque hay mucha gente que miente sobre esto. y los jefes están escépticos. Pero cuando es verdad, lo deben decir.

¿Cuál es el mejor momento para pedir un aurmento? Cuando puede demostrar que efectivamente cumplió con un trabajo; cuando todo mundo está contento por algún logro especial que haya tenido.

Nunca hay un momento bueno para esto. A los ¡efes justos les gusta hacer el aumento antes de que tenga que venir un eriipleado a pedirlo, y por eso, no les gusta que se adelanten. Al jefe que le gusta hacer aumentos, tampoco le gusta que se lo pidan. Poro hay veces en que es necesario pedirlo, porque existen jefes que pueden quedarse toda la vida con el empleado pagándole lo mismo.

¿Que les convence? Los jefes de las empresas son, al fin y al cabo, los que ultiman la decisión de aumentar o no el salario de un empleado. Al hacerlo o no, la mayoría de los entrevistados —algunos prefirieron mantener su opinión en anonimato-considera factores similares a la hora de determinar si éste merece o no ganar más.

¿Basados en evaluación? En primera instancia, un economista consultor opina que no es conveniente hacer un pedido de aumento de forma caprichosa, ya que éste no se debe hacer ni por capricho ni por favoritismo, sino sobre la base de un programa de reglas y parámetros establecidos previamente, que cada jefe y empleado debe conocer a cabalidad. Recomienda acordar por escrito metas de desempeño con el empleado, para que anualmente en una evaluación se revise su desempeño y el cumplimiento de las metas.

Adicionalmente, a la hora de decidir realizar un aumento, tomaría en cuenta la actitud y su relación con los demás (superiores y subalternos).

“as empresas corporativas modernas deberían tener un programa de aumentos anuales establecido, por inflación, mérito y ascensos, que se aplique en cada caso y evitar los aumentos no programados”, concluye el economista.

El jefe de Recursos Humanos de una empresa de comunicaciones considera cuatro factores a la hora de analizar el aumento de sueldo de un empleado. Primero, la inflación; segundo, se basa en el valor de la posición en el mercado; tercero, en el desempeño, que se basa en la evaluación anual, y por último, en el enriquecimiento del puesto (si se le ha exigido más metas).

¿O según productividad? El presidente de una empresa que vende productos electrónicos considera dos simples factores a la hora de aceptar la petición de aumento salarial: Debe sustentar su posición y demostrar honestidad.

Por otro lado, otros consideran mejor reconocer el aumento de sueldo antes que el colaborador lo solicite, pero si éste considera necesario pedirlo lo debe hacer, ya que “lamentablemente en muchas empresas no hay sistema de reconocimiento.

Un alto ejecutivo de una empresa que distribuye licores va en la misma línea, ya que en lo que más se fija para determinar un aumento de salario es en el desempeño de la persona, su productividad y si trae valor con su trabajo a la organización.

“Hay otros factores como la inflación y qué tiempo lleva la persona sin ajustes”, opina, pero los anteriores son más importantes.

El gerente general de una corporación de comunicaciones opina que “el desempeño del recurso humano y los aumentos de su productividad” es lo que cuenta. Además influye “su actitud, si está dispuesto a colaborar con sus compañeros y la forma como aporta ideas y mejora procesos”.

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