Comunicación efectiva: ¿Cómo lograrlo?

Las relaciones laborales son tan específicas, que constituyen una especialidad dentro de la comunicación.

La vinculación entre jefatura y subordinados (vertical u horizontal), la convivencia con los colegas, los requerimientos propios de cada proceso productivo, la jerga que acuña cada profesión u oficio, todos ellos son elementos que debemos analizar y cuantificar a la hora de profundizar en las relaciones interpersonales en la empresa.

Toda organización que tenga una cultura empresarial bien definida, debe conocer que “la comunicación personal” es una de las principales formas asertivas de comunicación.

Sin desmeritar el apoyo inmenso que la tecnología ha prestado en beneficio de éstas. Incluso la conexión cliente-empleado se ha vuelto más fácil a través de los distintos servicios que ofrecen los bancos, medios de comunicación, aerolíneas, restaurantes, floristerías, empresas turísticas, etc.

La comunicación efectiva con empleados, clientes, accionistas y vecinos es esencial, pues de ella depende la calidad de los servicios que ofrece, el crecimiento de la empresa, la productividad de sus empleados, el aumento de la cartera de clientes y la innovación en los productos. Por ello, cuanto más eficaz sea, mejor será el desempeño

de los colaboradores y éstos sentirán una mayor satisfacción laboral, entre otras razones porque comprenderán mejor sus tareas, y se sentirán más involucrados.

La circulación de información se puede realizar de múltiples formas. Los canales por donde fluye, hasta llegar a sus destinatarios conforma las redes de comunicación.

Estas hacen que el flujo de información sea regular, estable y previsible, evitando la sobrecarga o insuficiencia de información, que daría lugar a problemas de distorsión u omisión y serían fuentes de rumores incontrolados. Respetan la jerarquía y solo tienen en cuenta el puesto de los individuos, no su personalidad.

Tipos de comunicación

Descendente: fluye de abajo hacia arriba en la estructura empresarial. Su objetivo es que toda información que se genere ayude a las personas a desarrollar sus funciones de forma rápida y eficiente. Incluye la retroalimentación y el sentido de compromiso con la compañía.

Ascendente: Permite a los mandos superiores conocer los problemas del personal, facilita la integración y participación de los trabajadores, influye en una adecuada toma de decisiones, promueve la mejora de la calidad.

Horizontal: es la que se fomenta entre grupos de trabajo o personas que están al mismo nivel jerárquico. Fomenta el compañerismo y el espíritu de equipo, evita malos entendidos y enriquece la formación y experiencia de los trabajadores. Incluye grupos de estudio, seminarios y debates.

Hay otra característica de la comunicación, que es imprescindible considerar. Se trata de su capacidad totalizadora, es decir, sin ella ni siquiera es posible abordar otras zonas importantes del quehacer humano.

Sin comunicación no hay trabajo en equipo, ni es posible ejercer el liderazgo, tampoco hay atención de clientes o público, ni relaciones humanas hacia adentro o hacia fuera de la empresa.

Los recursos humanos son claves en el proceso productivo, tan o más importantes que los recursos de infraestructura, que además son renovables, lo que no es posible con los seres humanos. Por eso, sin trabajadores con buena calidad de vida, y ello pasa por un ejercicio razonable de su capacidad de comunicación, no es posible potenciar y mejorar el rendimiento de cada empresa.

Por eso, hoy no solo se piensa en la capacitación técnica. Se entiende que es importans.te invertir en capacitación dirigida hacia los trabajadores.